Episodio 5x40: De putas

Mi coche ya es oficialmente el Friki-Ford.

Ayer fue su bautismo. Llevé a mi friki-pandi (menos a Perl que ya la había llevado), de paseo. De paseo por el polígono de las putas. Sí, es una tradición. Pasamos por allí mientras se nos echan al capó. Pongo música de Radio Clásica, ópera tocó ayer, y freno cuando se acerca una para que Ox, que va de copiloto, se cague y me grite:

-¡¡Hija de puta no frenes que se está acercando!!!!

Les tenemos respeto y la verdad es que yo utilizo estos paseos no para reírme de ellas, sino porque son parte de una realidad que no queremos ver. No queremos prostíbulos, porque...jo, qué corte que te vean entrar en uno ¿no? Mejor llevar el coche a un lugar oscuro, con malas condiciones de salubridad y dejar a la chavalita que se hiele de frío en invierno y que se reviente las piernas de andar en verano.

Hay cosas que no queremos ver. Pero el taparnos los ojos no hace que desaparezcan. Y si esto sigue así en pleno siglo XXI, queridas, es porque la prostitución hoy sigue siendo un problema de mujeres. Si los hombres estuvieran en la calle, expuestos a peligros, chulos, navajazos, a extorsiones etc... ya se habría solucionado algo. Pero sólo nos afecta a las mujeres y a los maricas chaperos. Hay cosas más importantes en el país.

Y sí, después con todo mi papo, nos fuimos a jugar al lanzamiento de la chancla. Nos fuimos al único bar gay que conocemos en Ungraceland, enseñé a Coquí estrategias de beso (con otro modelo q no era ella....que os conozco) , bailé, me hicieron fotos, Coquí me regaló un juego completo de poker, porque he descubiero ese maravilloso mundo y la cosa acabó con desayuno. Hoy he hablado con mi chica favorita, Chica-Tren, y no sé...

CONTINUARÁ...