Episodio 6x36: Escapada desgraciada

Esta entrada está programada. Tras leerla se autodestruirá en... 5, 4, 3... Vale, siempre quise decir eso.

No, en realidad no se autodestruirá. Era sólo una coña, porque sí que la he escrito con antelación y la he dejado programada para hoy, sabiendo que iba a estar una semana de viaje de fin de curso con los chavales y era demasiado tiempo sin contar mis chorradas que me leyeseis. A estas alturas puede que ya hayamos salido en las noticias por comas etílicos, adolescentes saltando de balcón en balcón, o porque han hecho un grafitti en la Giralda, yo ya me lo creo todo.

Quitando lo del viaje no tengo mucho qué contar... bueno, en realidad... Tuve una cita horrorosa el sábado, la del viernes no estuvo mal. Pero la del sábado.. la muchacha era mona, todo hay que decirlo, pero hablaba tanto..TANTO.. De hecho, la invité a cenar a ver si con esas conseguía callarla y volver a centrarme en su físico, que era lo más destacable. Pelo moreno, largo, un poco rizado, ojos verdes claro, estilillo hippie.. Pero no. Hay gente que sabe comer, hacer el pino y hablar todo a un tiempo, jaté. Debí haber hecho como Angie me dijo, decir que acababa de acordarme que había dejado al perro en la lavadora y salir por piernas. Pero como una es así de educada.. aguanté el tipo, y esperé a que se durmiera para irme. 

Sí, he vuelto a ser una zorra desalmada y desgraciada. Sobre todo lo de desgraciada, porque resultó que se despertó justo cuando me estaba vistiendo. Lo peor de todo es que le había mentido diciendo dónde vivía, porque vete tú a saber si no iba a ser una psicópata y le iba a decir dónde encontrarme. El caso es que después me di cuenta de que me venía muy bien no decirle donde vivo, porque somos ¡casi vecinas! Así que mientras me decía adiós por la ventana, tuve que dar un rodeo que te cagas, meterme por otra calle, para volver a salir al mismo sitio, esconderme tras unos contenedores de basura y llegar a mi portal, que está casi al lado del suyo, por si acaso me veía. Pero es que... si se entera que vivo tan cerca...iuuuu (escalofrío).

Y digo yo...¿esto me pasa sólo a mí o alguien me comprende? Si es que no es culpa mía... ¡es que el patio está fatal!

CONTINUARÁ...